Ante los recientes cambios normativos que entrarán en vigor a partir del 1 de febrero de 2024, las empresas colombianas enfrentan un dilema crucial: la elección entre la factura electrónica y el POS electrónico. Esta decisión no solo afecta la operatividad diaria, sino que también es determinante para evitar posibles sanciones y multas. En este artículo, desglosaremos las diferencias clave entre ambos sistemas y ofreceremos claridad sobre cuál podría ser la mejor opción para tu negocio.
Comparación entre Factura Electrónica y POS Electrónico
La factura electrónica y el POS electrónico son dos pilares fundamentales en el nuevo esquema de facturación electrónica en Colombia para 2024. Aunque ambos cumplen con la función de registrar transacciones comerciales, existen diferencias significativas en cuanto a su implementación y requisitos.
Detalles Específicos:
- Requisitos y Actualizaciones: La factura electrónica continúa operando bajo los lineamientos previos, con mínimas modificaciones. Por otro lado, el POS electrónico introduce cuatro nuevos requisitos adicionales a los ya establecidos para la factura electrónica, ampliando así el espectro de cumplimiento.
- Eliminación de la Norma de las 5 UVT: La implementación del POS electrónico marca el fin de la restricción de las 5 UVT, estipulando que ambos documentos, factura electrónica y POS electrónico, deben emitirse por valores desde $1 en adelante, unificando los criterios de emisión.
- Doble Resolución Necesaria: Con el POS electrónico, las empresas deben gestionar dos resoluciones distintas: una para la facturación electrónica y otra para el POS electrónico, lo que podría implicar una mayor carga administrativa.
Recomendaciones de la DIAN
La DIAN motiva a las empresas que ya han adoptado la factura electrónica a mantenerse en este sistema, el cual ha demostrado ser eficaz y confiable. Seguir las directrices de la DIAN no solo asegura la conformidad con las regulaciones vigentes, sino que también facilita las operaciones comerciales.