Es el sustituto de la factura tradicional (manual) que brinda condiciones de seguridad, reduce costos de envío y además facilita el seguimiento administrativo para los gerentes y de la entidad encargada de los impuestos nacionales.

Algunos de los requisitos para facturar electrónicamente es que la empresa o compañía, se considere legalmente como persona jurídica; aunque también está la denominación para las personas naturales que tienen bienes o servicios superiores a 3,500 UVT, (lo que significa que tiene capital aproximadamente por $147,742,000) o también una de las particularidades es que tenga ingresos brutos superiores por 4,000 UVT.
Algunos de los beneficios de tener una factura digital es el respaldo del servicio prestado, facilidad en la visibilidad de las facturas con alertas permanentes y evitar multas por atraso de pago de impuestos.

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a factura POS, ambas son totalmente diferentes, ya que una factura POS es el certificado generado por un software POS por el pago de un bien o servicio y no es comunicada en tiempo real a la DIAN; mientras que la factura electrónica sí se reporta, si la empresa o la persona debe facturar electrónicamente se debe de validar con el contador ya que ellos conocen la normal y saben si los movimientos financieros aplican a ley.

En los establecimientos se debe de generar facturación electrónica cuando el valor del producto o servicio supera las 5 UVT las cuales para este 2023, cada una equivale a $42,212; lo que significa que son ventas que iguales o superiores a $212,060.